La captura masiva y el posterior traslado forzado de los africanos, así como su ingreso en las colonias americanas como esclavos tuvieron repercusiones en los tres continentes involucrados en este tráfico humano: Europa, África y América. Desde los primeros tiempos se produjeron complejos procesos de mestizaje e interculturación: los esclavos se integraron primero en la economía, al tiempo que se ubicaron en la estructura social y evolucionaron hasta llegar a la transformación de su cultura original y de las culturas americanas con las que entraron en contacto. Las comunidades afroamericanas han dejado su huella en la cultura de diversos países de forma específica en cada uno de ellos.
Actualmente las poblaciones descendientes de los esclavos africanos son parte de la problemática de cada país en el que están insertas, y en algunos de ellos son objeto de marginación y discriminación, sufriendo con mayor intensidad las carencias materiales y culturales. En este texto la autora realiza una síntesis de las causas y consecuencias que tuvo la presencia africana en el desarrollo económico, social y cultural de América.