Biconchuda es una novela de amor entre dos mujeres. Por supuesto es un amor no convencional en el sentido romántico de la palabra y que, además, juega como epifanía literaria, como una revelación para la narradora. Ella vivía una vida de estudiante universitaria, de trabajo rutinario como planta permanente en una oficina estatal. Leda aparece en su vida para sacudir el polvo del acostumbramiento que ella criticaba en su círculo cercano pero no reconocía en su propia vida. La novela va siempre para adelante, conducida por un ritmo constante que no permite pausar la lectura, en virtud de una escritura precisa y nunca rebuscada. La narración inserta al lector en ese despliegue. Y de repente se vive un concierto de Los Natas en una casa Okupa de La Plata, o caminar tribunales como si el aroma del lugar se colara por entre las letras de las hojas que avanzan a toda velocidad.