Con tu corazón y otros cuentos invita al lector a percibir de manera singular. Aquí los personajes conciben su entorno, se compenetran con él y, a su vez, se muestran ajenos. La fragilidad de las cosas vivas se despliega mediante imágenes poéticas: el olor horrible de las algas de un río, los destellos de vidrio que atraviesan la oscuridad, los latidos de un corazón caliente o el deseo de ser un árbol componen frases plenas de emotividad. Encontramos personajes hechos de luz; una mujer que camina alerta; seres arrojados de su contexto o extraños en el mundo en medio de sombras y espacios de señales dislocadas; invasiones y persecuciones. Adriana Díaz Enciso muestra la potencia del cuerpo y sus atributos, como lo ha hecho en obras anteriores. El cuerpo dotado de sentidos es capaz de hacerse del mundo circundante, y también se aproximará a la decadencia, a la vejez, a la putrefacción. Los personajes de esta narradora encarnan el extrañamiento ante la existencia y enfrentan un mundo cuya potencia los aqueja. El mundo resulta irreductible y se manifiesta más allá de las palabras. Díaz Enciso permite que el pálpito de estas historias-corazones acompase sus formas y construye un libro fuera de lo común, un libro vivo de carne y de hueso.