En esta montaña rusa posapocalíptica, el filósofo Srecko Horvat nos invita a explorar el Apocalipsis como si fuera una revelación, más que como un final en sí. Argumenta que la única forma de prevenir el final, es decir, la extinción, es comprometerse en una lectura fina de varias amenazas interconectadas como son la crisis climática, la era nuclear y la pandemia en curso. Traza en este libro las líneas que inauguró el filósofo Güther Anders y toma prestados términos de la ciencia climática dándole una lectura teológica («punto de inflexión escatológico», por ejemplo).
Ya no sólo se trata de los riesgos de la era nuclear en la que nos hallamos o de la crisis climática, sino que vivimos la colisión de ambas, entrelazada, además con otros peligros, no sólo los ligados a la pandemia sino también los virus del capitalismo y del fascismo. En su investigación sobre el futuro de lugares como Chernobyl, el Mediterráneo o las islas Marshall, así como de muchos otros afectados por la COVID-19, Horvat muestra que la revelación es simple e impredecible: las alternativas ya no son socialismo o barbarie, nuestras alternativas hoy son o la reinvención radical del mundo o la extinción masiva.