Centremos la mirada en la megacuenca Grijalva-Usumacinta y, en particular, en el Valle de Jobel, en los Altos de Chiapas. Desde ahí, este libro incluye una comparación entre la gestión del agua por cuencas hidrológicas, planteada desde la esfera gubernamental y, de otra parte, el manejo local del agua. Ello incluye las formas, estrategias y manera en que la cultura tsotsil maneja el agua dentro de sus parajes y sus territorios, las dimensiones particulares que están en juego, la tradición y el simbolismo asociados. El punto de análisis es el manejo de las aguas locales para uso doméstico, que presupone una organización social independiente de las instituciones gubernamentales, un acceso negociado a las fuentes de agua y, en las localidades indígenas, un marco de significación y de acción al cobijo de su cosmovisión. Esta perspectiva, a diferencia de la esfera institucional, se basa en las relaciones entre el ser humano, el paisaje, la naturaleza y la sobrenaturaleza. El libro hace una crítica a la territorialidad por cuencas hidrológicas y ofrece una visión más amplia sobre las diversas dimensiones que entran en juego en el manejo indígena del agua y en colonias y barrios mestizos de la ciudad de San Cristóbal de las Casas, proponiendo una territorialidad alterna basada en la profusión de manantiales, de montañas y de los Anjeltik, númenes que traen las lluvias al Valle de Jobel.