En los orígenes de la nación chilena se ocultan una serie de elementos raciales que pueden remontarse a muchos años antes de su establecimiento formal como institución política. Las ideas de raza y racismo son el eje central sobre el cual el autor intenta analizar dichas retóricas de inferiorización, provenientes tanto de la ciencia, de la política, como de las prácticas culturales de los siglos XVII, XVIII y principalmente del XIX.
Se trata de un trabajo transdisciplinario,. que se fundamenta en una revisión crítica de fuentes primarias de la época y de una extensa literatura secundaria proveniente de la historia de la cultura, de la ciencia, la antropología social y cultural, así como de la filosofía.
No se trata de una obra de historia, ni menos de antropología, solo es un intento por pensar o cartografiar nuestro pasado colonial (y poscolonial) como un ejercicio de conceptualización que nos permita cuestionar aquello que se denomina identidad chilena.
El libro ha sido reseñado en la Revista del grupo de investigación América Latina de la Universidad Paris 8 en el siguiente enlace.