Historia, leyenda, bitácora de viaje; por momentos, eco de Las mil y una noches. Todo esto y muchas otras posibles lecturas pueblan, línea tras línea, Isjir. Retrato hablado de un migrante iraquí, la novela en la que Susana Cato ha sabido penetrar en el alma de su abuelo, Morat Cato, quien partió de desiertos y ciudades subterráneas para llegar, en un primer acercamiento, hasta Ciudad Ixtepec, en el estado mexicano de Oaxaca. Pero habrá de regresar a su Medio Oriente y, en un segundo intento, volver a América y detenerse en Detroit para trabajar en los famosos modelos T de Henry Ford, quien incluso lo menciona y reconoce. En un estilo por demás seductor Susana Cato ha escrito un libro fascinante por el que transitan todo tipo de personajes en largos periplos que culminan nuevamente en México, en León, Guanajuato, donde se funda al final la dinastía. Isjir(que es como sonaba a los oídos vírgenes de inglés de Morat la expresión It's here), Retrato hablado de un migrante iraquí, atrapa y conmueve desde las primeras líneas y al terminar, el lector queda agradecido con la autora por haber creado una obra que guardará largo tiempo en su recuerdo.