El doctor Mukwege, galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 2018, ha sido testigo de una destrucción inimaginable, de un dolor que nadie debería sentir jamás, y ha salvado incontables vidas aun a riesgo de perder la suya en varios atentados. Su incansable labor para curar a las supervivientes de la violencia sexual en su país, el Congo, asolado por las guerras, le ha hecho merecedor del reconocimiento como defensor mundial de los derechos de las mujeres. En su libro, en parte autobiografía y en parte un llamamiento contra la violencia sexual en tiempos de paz y de guerra, Mukwege destaca el papel de las extraordinarias mujeres que le formaron y le inspiraron. En él narra una historia de lucha y sufrimiento, pero también de esperanza y resiliencia. Ha visto a miles de mujeres al borde de la muerte y ha escuchado sus desgarradoras historias, pero también ha sido testigo de cómo sanaron, compraron tierras, montaron empresas y contribuyeron a reconstruir sus destrozadas comunidades. El libro denuncia asimismo las violaciones y la violencia sexual que sufren las mujeres en lugares como Estados Unidos, Europa y Asia, enfatizando en todo momento el maltrato al que se enfrentan las mujeres en los hogares y las calles de todos los rincones del mundo. Finalmente, el doctor Mukwege apela a los hombres, guiándoles y alentándoles a convertirse en aliados en la lucha contra los abusos sexuales. A través de su ejemplo personal y sus ideas, confía en inspirar una nueva forma de «masculinidad positiva»: un cambio en la conducta y la actitud de los hombres que contribuya a construir unas sociedades más inclusivas y con mayor igualdad de género.