Cuna de las tecnologías digitales (Google, Apple, Facebook, Uber, Netflix), Silicon Valley encarna el triunfo industrial más insolente de nuestra época. Esta tierra de buscadores de oro se ha convertido en la posguerra en el centro de desarrollo del aparato militar y de la informática, y hoy es sede de un frenesí innovador que declara obrar por el bien de la humanidad, pero define nuestras existencias con finalidades privadas. Silicon Valley no remite solamente a un territorio. Es también, y antes que nada, un espíritu en vías de colonizar el mundo. Se trata de una colonización de un nuevo tipo llevada adelante por numerosos misioneros (industriales, universidades, think tanks) y por una clase política que incentiva la edificación de valleys en los cinco continentes bajo la forma de ecosistemas digitales y de incubadoras de empresas start-up. Este libro describe la trayectoria de Silicon Valley, desde sus orígenes en la contracultura y la psicodelia californianas hasta la institución de un capitalismo de nuevo cuño, un tecnoliberalismo que, a través de los objetos conectados y la inteligencia artificial, pretende extraer beneficios del menor de nuestros gestos, inaugurando la era de una industria de la vida. Más allá de un modelo económico, lo que se instaura es un modelo civilizatorio basado en la organización algorítmica de la sociedad que trae aparejada la prescindencia de nuestro poder de decisión. La silicolonización del mundo pretende desarticular los fundamentos de la retórica de la emancipación digital, para recuperar los niveles de soberanía individual y colectiva que nos fueron arrebatados bajo el modo de vida californiano.