Se trata del primer libro de poesía escrito y publicado por Anne Carson tras la muerte de su hermano acaecida cinco años antes y viene a detallar/retratar el proceso de reconciliación con la pérdida y de aceptación de la misma a través de la traducción del Poema 101 de Catulo: «Para su hermano que murió en el camino». El resultado es una experiencia poética y visual que incita a una noción más abierta y desprejuiciada de lo que suele entenderse por lectura poética.