Nuestras casas serán siempre grandes dejó escrito Perla en una ilustración que viaja con nosotras. Así pues, de ese vínculo y de ese acompañamiento y del compartir la vida vimos y sentimos las verdades que aquí se expresan, así como los problemas que nos atraviesan desde el intento de recuperar las genealogías de cada quién, explorarlas, reconocerlas en nuestro propio cuerpo y en nuestras actitudes siempre en conflicto. Lo que aquí en los textos que siguen se narra es parte de las vidas en tránsito de un colectivo diaspórico con origen en la cultura italiana y más allá.