Prudencialismo. El gobierno de la prevención es un libro sobre la prevención y en contra de la prevención, que analiza cómo en la retórica preventiva los consejos se confunden con el alarmismo y las amenazas abiertas y manifiestas. La prevención es el caballo de Troya de la punición. La prevención activa pasiones autoritarias. La legítima defensa es la técnica para justificar la violencia preventiva. Pero además con la prevención llegan las facultades discrecionales, los controles comunitarios participatorios y el hostigamiento policial. La prevención es una forma de sortear la justicia y ejercer un castigo anticipatorio. Gran parte del punitivismo contemporáneo que llega por arriba y por abajo está agarrado al fetichismo de la prevención, al giro preventivo de la vida cotidiana, por eso es tan difícil desandar el punitivismo.