El orden capitalista internacional tardío ha colocado a la relación vida-muerte en el centro de la discusión social, humanista, ecológica y artística. Se acentúan más los procesos de pobreza y desigualdad social, así como los escenarios de violencia y muerte que involucran a personas, al ecosistema y a la vida misma. Esta es una invitación a repensar el mundo contemporáneo a través de discutir sobre biopolítica, necropolítica, juvenicidio y narcocultura, además de que discutirá la conformación de rasgos de distinción de algunos sectores de las clases media y alta que enfatizan las desigualdades.