Pedro Lemebel nos sorprende con un libro de crónicas, esta vez orientadas con más fuerza hacia lo urbano
En Zanjón de la Aguada, Lemebel toma la voz de las minorías sexuales, de los habitantes de las poblaciones periféricas, de los desposeídos, de las mujeres, para entregar una denuncia moral, una invitación a mirar lo que más nos duele, ese Chile que carece de oportunidades, ese al que los discursos políticos no los tocan pues siguen siempre igual. Pero el autor no mira esta realidad de forma dramática, sino que lanza sus dardos llenos de ironía y sarcasmo, mostrándonos que la indiferencia y el arribismo son enfermedades más agudas que la pobreza.