A-L-X parece un niño, pero es un extraterrestre. Viene de un planeta lejano en el que eres niño toda la vida. Su misión en la tierra es observar de cerca a los terrícolas y sus extraños comportamientos. Por suerte, A-L-X no está solo. En sus aventuras lo acompaña Flumi, su fiel mascota, un travieso cambiaformas. Ambos viven en un edificio lleno de vecinos entrometidos. Por ahora, ellos piensan que A-L-X es un niño, aunque uno muy peculiar...