Mirar al cielo nocturno en busca del sentido de la existencia es un sello distintivo de nuestra humanidad. Desde la Edad de Piedra hemos contemplado las estrellas y nos hemos sentido hechizados por su majestuosidad y belleza. Clark explora esta fascinación compartida por todos los seres humanos durante milenios y que nos ha moldeado como civilización y como individuos. La contemplación del cielo nocturno ha dado forma a nuestra comprensión científica del universo; nos ha ayudado a navegar por el mundo terrestre; nos ha dado un lugar para proyectar esperanzas y temores; ha servido de inspiración a poetas, artistas y filósofos; nos ha revelado nuestro auténtico origen y nos ha dado pistas sobre nuestro destino. Esta es la impresionante historia del universo y nuestro lugar dentro de él.