El fracaso del capitalismo en México y las sociedades de sirvientes y servicios que han conformado el país, son los argumentos que emplea el autor de esta obra para demostrar que durante siglos una historia propia, muy distinta de la europea y norteamericana, emerge ahora reclamando una posición central en el análisis de la América colonial. Con una renovada mirada de la recuperación de un método empírico en la construcción de la historia y las ciencias sociales, expone que durante más de 500 años se fueron generando las condiciones para la creación de un amplísimo grupo social, hoy mayoritario, al que denomina "los despojados".