Un fantasma recorre el mundo, y esta vez no es el comunismo sino una nueva derecha que gana espacios en Europa, los Estados Unidos y América Latina y que, ya sea por rechazo, subestimación o perplejidad, casi nadie entiende. El historiador Enzo Traverso genial analista de las ideas contemporáneas pone la lupa sobre las nuevas caras de la derecha que, atenta a las fluctuaciones de la opinión pública, logra conquistar a los electores con su irreverencia y su furioso discurso contra las élites políticas. En pleno auge, estos movimientos supieron descartar sus rostros más violentos y cambiar de piel, embanderándose en un ideal de nación amenazada y valores en riesgo, que ve al otro (el inmigrante, el pobre, los jóvenes de barrios periféricos, los feminismos) como responsable de la crisis económica y social. ¿Qué hay de nuevo y qué de viejo en estas corrientes que se pretenden revolucionarias? ¿Qué tienen para proponer? Traverso traza una guía imperdible acerca de la nueva derecha, así como de su correlato: el vacío de poder del sistema de partidos tradicionales, que han perdido sus bases sociales y también sus discursos identitarios. Así, reconstruye las paradojas de un escenario en que líderes como Jair Bolsonaro o Donald Trump se valieron de sus carismas personales o mediáticos y, sobre todo, sacaron provecho de los defectos de sus adversarios para ascender sin necesidad de demostrar méritos propios. Y muestra cómo, si se la confronta con el fascismo clásico de comienzos del siglo XX, la actual derecha radical carece de un imaginario utópico y de ideas de futuro, pero entraña un peligro que no conviene ignorar y que interpela a las capacidades de la izquierda para bosquejar una alternativa. Con un nuevo prefacio del autor, en el que reflexiona sobre los efectos de la pandemia de coronavirus y se pregunta cómo leer el relativo retroceso de los referentes antisistema en el marco del colapso sanitario, este libro es una pieza fundamental para entender la crisis de hegemonía que atraviesan las democracias hoy. Y un llamado a construir un New Deal del siglo XXI, capaz de enfrentar el cambio climático y revertir las transformaciones producidas por cuarenta años de neoliberalismo.