Construcción de poder popular y a la vez la irrupción del otro, la cuestión democrática que las generaciones confrontan desde hace milenios se presenta hoy como institución del buen vivir colectivo y como resistencia al poder financiero internacional; como conjunción de lo popular y la diferencia; como convocatoria teórica y práctica a una reinvención y una articulación creativa de los grandes conceptos heredados del léxico político europeo igualdad, libertad, emancipación, hegemonía, autonomía, para tramar con ellos una amplia red de contención de experiencias radicales que buscan oponerse al saqueo mundial operado por muy antiguos poderes renovados. Democracia como reflexión sobre el poder y acción colectiva para su disputa, pero también como hospitalidad de lo minoritario y de lo raro que atesoran el pensamiento, el lenguaje y las prácticas. Posibilidad de tomar la palabra y recuperar de la alienación la potencia política y social que permite imaginar y realizar transformaciones: creación retórica, jurídica, económica, simbólica y social de condiciones que permiten la reunión de los cuerpos con lo que los cuerpos pueden es decir de las inteligencias con su potencia de crear, de imaginar y de pensar.