Adictiva y a la vez incómoda, ágil hasta el vértigo, sabiamente ambigua. Arriesgada en más de un sentido, esta espléndida narración de Nora Coss, cuenta con una mezcla de inocencia y cinismo las peripecias de una familia como tantas en el norte del país. Los celos entre hermanas por el amor del padre, y el amor del padre mismo, tocan aquí extremos peligrosos. La voz de a protagonista, una adolescente sin pelos en la lengua, retrata sin piedad una sociedad envuelta de doble moral y que merece, a fin de cuentas, ser destruida.