¿Por qué seguir imaginando la literatura chilena en base a los apellidos, los premios, las
influencias y las autorías individualistas con que se valida la constante transacción del
capitalismo cultural, si lo que queremos es otro Chile, otro sistema de relaciones y otra
literatura?
Por una pluralidad literaria chilena, el primer libro ensayístico de Carlos Labbé,
presenta el caso de Juan Emar no como el seudónimo literario de alguien, sino como la
contraseña de un desafío a las condiciones conservadoras que quieren reducir las poéticas
contemporáneas. El colectivo Juan Emar desde sus Notas de Arte hasta su Umbral/La Puerta y
los libros que seguirán apareciendo firmados por ese grupo reivindica una narrativa que
destruye la queja individual en busca de la mayor cantidad de capas posibles de experiencias de
belleza y justicia histórica.