En ¿Qué es la ternura? hay una poesía para animales, para el instante previo al amor y, también, hay una poesía para lamerse. Hay una poesía rota y una ciudad escondida en los versos de un poema. Hay una poesía que dibuja rostros que se desvanecen al nombrarlos. Una poesía con lupa para mirar los espacios mínimos de las cosas grandes. Hay una poesía silenciosa pero que aturde e incomoda. Una poesía investigadora privada que disecciona las emociones y los recuerdos con la imprecisión de un cirujano ebrio. Hay una poesía filial, leal que nunca va a abandonarte, como esa voz en tu cabeza que te dice que debe haber algo más: "seguro hay algo más". Son líneas de insatisfacción y ansiedad que van armando un camino descendente en la página y ascendente en tu interior. Sí, pero ternura, ¿qué es? La pregunta se mantiene a flote después de la lectura porque en esa suspensión está la respuesta que nos regala Flavia Calise