Un libro para mirar de cerca el mundo animal, pero desde una nueva y original perspectiva que permite a los más pequeños descubrir una faceta imprevista y sorprendente de sí mismos. Esta serie de dieciséis ilustraciones de animales en bitono realza con humor y expresividad acciones y actitudes rutinarias (comer, reír, jugar, cantar, e incluso soñar y olvidar), que se enumeran en una divertida letanía a modo de canción. Un texto sencillo que va creciendo en intensidad y significación a medida que el lector avanza, convirtiendo la lectura compartida en un divertido juego de metáforas que describen su propia personalidad.