El que me escucha pierde la esperanza. Soy el sin remedio. Yo soy aquel que hace daño por bruto y que, al tratar de sanar, lastima más fuerte, por torpe. Soy el peor de todos. Tascá, el enamorado.
En esta novela, tres monólogos de distintos personajes dibujan un paisaje sórdido, que gana magia gracias a la escritura asombrosa de Marina Closs. Empieza Olga, desde el prostíbulo donde protege a la Boba y se sorprende con Reencarnación. Sigue Ezequiel, un chico que trepa a los techos con su hermana y aprende a tocar el acordeón con Tascá. Y termina el propio Tascá Skromeda, el peor de todos y, también, el que puede definir con mayor nitidez en qué consiste el sufrimiento.