Los últimos doce años de la historia de Bolivia han sido fundamentales. Desde la llegada de Evo Morales al gobierno en 2006, el país ha entrado en un torbellino de transformaciones que han tocado la estructura estatal, las formas de participación política, el modelo económico, las jerarquías sociales, la inclusión simbólica. El objetivo de este libro es debatir sobre la profundidad de los cambios, su sentido, sus implicaciones. Para esa tarea, quince académicos ofrecen sus análisis concentrándose preponderantemente en el dinamismo en relación con el ámbito de la cultura en su definición más amplia. Se ofrecen miradas que, más allá de una lectura apasionada que defienda una u otra posición, proponen una interpretación basada en observaciones empíricas que develan que el proceso de cambio es complejo, multidimensional, con muchas luces y sombras.