Más que historias estos cuentos son casi mitos, que atrapan con pinceladas de belleza y dibujan símbolos en el aire. Rebeldes, libres y muy apasionados, los cuentos de Luisa Valenzuela son el mejor ejemplo de la intensa literatura de una de las voces más profundas de la actual narrativa latinoamericana.
Pero contar historias puede ser eso y mucho más. Porque podrá uno buscar en estos cuentos y perderse en la inmensidad. Podrá dar vueltas en la calesita sin saber si las paralelas acabarán por juntarse. O podrá reír con el ritual de los chapayecas, así hasta perderse en el laberinto de los días y las palabras.