Flora Tristan (1803-1844), filósofa, feminista, socialista y escritora, trabajó incansablemente en obras como Peregrinaciones de una paria (1837), Paseos por Londres (1840) o Unión obrera (1843) en que desgranó la inminencia de una revuelta social consustancial a las consecuencias de la revolución industrial y la aparición de un nuevo actor social: los obreros.
Entendió a partir de sus experiencias personales y profesionales que la libertad de la humanidad dependía en gran medida de la igualdad de todos los seres humanos. Esa igualdad se alcanzaría mediante la unión de los y las obreras.
Mesías para unos y madame colère para otros, Tristan logró lo que muchos de sus contemporáneos deseaban: no dejar indiferente a nadie.
En este libro, que llegó a las diez ediciones en su época, se trazan asuntos que influirían de manera indiscutible en el socialismo materialista de Marx y Engels tales como la plusvalía, la organización obrera e incluso la revuelta social.
Con Mary Wollstonecraft y Olimpia de Gouges, es una de las madres del feminismo.