Publicado por primera vez en 1948, Autobiografía de Irene cumple las promesas de la mejor literatura: una narración diáfana, un estilo de económica precisión, el vuelo de la imaginación a sus anchas. En estos cinco cuentos, que transcurren en escenarios tan diversos como la Roma antigua, una ciudad de China o el campo de la provincia de Buenos Aires, Silvina Ocampo explora la identidad, la mentira, el rencor, la muerte, la melancolía, los sueños, las certidumbres e incertidumbres acerca de lo que ocurrió o no ocurrió: a menudo, las líneas temáticas se confunden en la calma y un inusitado esplendor comparece con toda su violencia.