Los ensayos, que estaban destinados a ser quemados, atraviesan temas diversos, desde los dibujos animados como el Llanero Solitario, el Pato Donald y Babar, hasta literatura, lecturas sobre Antonio Skármeta, Carlos Droguett y Ernesto Cardenal; así como también el prólogo a La historia me absolverá, de Fidel Castro. Es un libro que polemiza con cómo se cuenta la historia, y que no se reeditaba hace más de cuarenta años.