¿Y si los fascismos no llegan siempre de uniforme? ¿Y si ya no es la política el sustrato en el que germinan los fascismos de este siglo XXI? ¿Y si se ha instalado poco a poco un Fascismo de Baja Intensidad (FBI) que no permite un afuera y que ya no requiere de armas o leye para extenderse y profundizarse?
Antonio Méndez Rubio nos permite ver e indagar, dudar y sospechar de un estado de cosas inquietantes que, sin embargo, nos puede permitir "encontrar en la vivencia del dolor una travesía no de repliegue sino de despliegue, no de ceguera sino de escucha".
Si esete libro te deja indiferente, preocúpate. Puede ser que contengas a uno de esos "pequeños fascistas de todas las naciones, razas y clases" que se hospedan más o menos invisibles, más o menos cómodasmente, en nuestra subjetividad.