El concepto de emergencia indica la existencia de un ámbito en disputa: el posicionamiento frente a lo previsible y lo imprevisible que engendra objetos de investigación. La doble acepción del término emergencia da cuenta de dos tradiciones intelectuales que se hallan en la base de la indagación del cambio. Mientras, por un lado, la dignidad humana urge a combatir o aliviar el daño, aunque no se tenga una idea clara de los fenómenos, por el otro lado, la alteración drástica de la normalidad constituye la oportunidad de descubrir el funcionamiento del mundo e inventar nuevas formas de hacer y de vivir.