La segunda novela de Paula Brecciaroli (Buenos Aires, 1976) narra el universo del manga y el animé a través de la vida de Gastón, un cuarentón apático que sigue viviendo con (y de su) padre y cada tanto lo ayuda en su trabajo de plomero. El protagonista tiene un sueño: ser reconocido en el mundo del manga y el animé para darle un sentido a su vida. Sin embargo, solo rememora las viejas épocas, cuando organizaba festivales y hasta compraba historietas en Japón. Pero sobre todo siente nostalgia por una chica que conoció en la feria de Parque Rivadavia y aún no puede olvidar. Así, la soledad atraviesa la historia de Gastón, un hombre solitario disociado de su familia y la sociedad, que solo busca un poco de amor y con tal de alcanzarlo, es capaz de crear una chica tridimensional para encontrar su chica perfecta.