CLAUDIA HERNÁNDEZ DE VALLE-ARIZPE
Perros muy azules obtuvo en 2010 el Premio Iberoamericano de Poesía Jaime Sabines para Obra Publicada. Este libro de Claudia Hernández de Valle-Arizpe constituye, hasta la fecha, el volumen más desconcertante de su autora. De rancio abolengo lírico, fue enrareciendo su lenguaje hasta llegar, aquí, al reconocimiento de un fracaso esencial: el canto como expiración de la belleza, el cuento como aspiración de la verdad. Acaso, y porque siente una irónica nostalgia por los ritos órficos, Hernández de Valle-Arizpe desciende al Hades -a la palabra "abisal" de José Ángel Valente- para salir, a solar, hacia la superficie del habla. Perros muy azules aborda las peripecias de un ermitaño ("solo"), una mujer con Alzheimer ("enferma") y una joven ("el viajes"). Tres relatos unidos por la desubicación sentimental, geográfica y mental de sus personajes, que pasan del verso a la prosa bajo el mismo principio de indeterminación. Si el "solo", inspirado en el escritor Juan Vicente Melo, monologa en breves cadenzas sobre el aislamiento de sus últimos días, la "enferma" narra paulatina conversión a la fe del olvido, mientras que la muchacha describe los paisajes de su juventud autoconsciente: "Reconstruyo detalles como si navegara un río / y mis ojos siguieron a un tiempo / la superficie y el fondo" "En una realidad de imágenes que tiemblan", según la autora, la única historia que podemos contar, la única versión de esa historia que podemos contar, la única versión de esa historia que podemos contarnos a nosotros mismos, es una ficción de palabras que tiemblan involuntariamente. Claudia Hernández de Valle Arizpe ha escrito, desde la poesía, esa extraña, convulsa y fascinante ficción.