Proyectar mundos es un manifiesto que explicita la pregnancia que el diseño ha tenido en las últimas décadas en la adaptación y el desarrollo del individuo en sí mismo, las sociedades y la civilización, más allá de la concepción clásica que remite la disciplina al ámbito meramente decorativo o funcional del objeto que soslaya sus repercusiones culturales, económicas y políticas. Una praxis que no atienda a tal impacto, señala Friedrich von Borries, termina por confirmar las lógicas de poder y comunicación.
Frente a la necesidad de repensar el diseño desde una perspectiva política, von Borries promueve una práctica que potencie nuevas formas de convivencia y autorrealización de los individuos fuera de los mecanismos coercitivos propios de las sociedades de sugestión.