Alemania, 1933. Tamara Danischewski es una brillante bailarina de 21 años que trabaja de noche en el cabaret para sobrevivir con su madre, mientras disfruta de su juventud y de sus actuaciones. Posa para el pintor expresionista Otto Dix, con quien establece una amistad que bruscamente se interrumpe con el avance de las fuerzas nazis. Se casa con un hombre del que obtiene seguridad pero a quien queda subordinada por el resto de su vida, recluida en la planta alta de una casa en el campo, viendo cómo su innominado esposo sale con otras mujeres mientras ella entabla relación con un perro sin dignidad, el ama de llaves y el jardinero.
Esta novela es otra muestra de la maestría narrativa de la premiada Nina Jäckle. La cadencia de su ritmo recurrente nos sitúa en la atmósfera quieta y opresiva de Tamara en la madurez de la vida. Su relato se nutre de su esplendor trunco y de aquello que se lo acerca: tarjetas de autógrafos, palabras de su amigo pintor, el vestido con el que posó, deseos, experiencias, que vuelven continuamente y arman de manera gradual una magnífica composición retrospectiva.