Un poema basado en una vieja fotografía, en la cual la abuela de la poeta Robin Myers aparece bailando con un vestido blanco. A partir de esa imagen, de su punzada, se construye un relato complejo sobre la vida: la de los ancestros y la propia, donde se trenzan los tres hilos del tiempo.
mi abuela de veintisiete, veintiocho años, quizá de treinta
baila a solas en un vestido blanco, con los brazos ligeros y descalza,
con faldas que en torno a ella lo barrían todo en una ráfaga de gracia,
su rostro oscuro inclinado a la cámara pero sin ver hacia ella,
sonriendo un poco, como si se asombrara a sí misma en silencio,
como si ella supiera que tenía algo hermoso en su interior